Preparando mí libro!!

Historias y opiniones para la participacion politicadesde una experiencia cristiana y peronista

Introducción

Intentaré rejuntar en este librito, una serie de notas de opinión escritas a lo largo de mi experiencia de participación, con alguna introducción del momento histórico y del acercamiento personal a esa situación.

Esta colección, no estará exenta de contradicciones y errores, de pobrezas argumentativas y conceptuales. Pero intenta reflejar las situaciones que me llevaron a participar en diversas instancias de la "historia chiquita" de nuestro paisaje sociocultural.

Por eso, antes de cada uno de los artículos de opinión, los cuales en su mayoría fueron publicados oportunamente en portales y medios gráficos de nuestra provincia, intentaré describir el momento histórico y las circunstancias particulares que me llevaron a emitir esa opinión.

Incluye como apéndice, una colección de reflexiones en formato de poemas con introducción, escritas en los primeros años, en época de los '90 frente a la tristeza y desaliento provocados por el menemismo y la ola de privatizaciones y apertura económica que dividía a nuestro pueblo con el tristemente celebre [un peso, un dolar], entre los que tenían un peso y compraban en Miami y los que tenían cero y se juntaban en las rutas, alrededor de una olla de comida (ollas comunitarias). única forma de lograr una ración de alimento diaria, sin aporte del estado, ni de organizaciones políticas.

Muchos no recuerdan, pero a esos que pedían "comida para sobrevivir" se les llamaba "piqueteros" porque cortaban el "derecho a circular libremente"...

Creo necesario este intento de contar mi experiencia, que en realidad es de todo un conjunto de personas,  de los que me rodean, los que me anteceden y son las bases de los que me continúan.

No puedo contar esto, sin apelar a mis padres, la comunidad de San Jose Obrero, los curas obreros a quienes desde los seis años escuchaba reunidos en mi casa paterna, sin valorar y agradecer la COMUNIÓN de ideales y el esfuerzo y el apoyo de mi esposa y sin contarles la alegría de ver los intereses y el compromiso de mis hijos que fueron parte de todo esto.

Espero que les guste, les sirva y que los anime a escribir sus experiencias particulares.

necesitamos recuperar la tradición de participación política de nuestros padres, trabajadores, chacareros, ciudadanos siempre involucrados en la discusión del espacio común.

No se quienes nos convencieron de que "el lunes hay que trabajar igual" ya nos pasó, de haber perdido 20% del trabajo  por un cambio de gobierno, nos pasó de haber perdido el 13% del sueldo por votar una alianza, de haber trepado al salario más alto de américa latina por haber votado un gobierno popular. Se apropiaron de nuestros ahorros por votar un gobierno sin plan económico.

Es cierto que más del sesenta por ciento de la población no tiene ahorros, gran parte ya no tiene vivienda, y más del 20% de esos tampoco tiene trabajo formal.

Solo tenemos nuestro trabajo a nivel individual, 

pero hasta los tabacaleros de Goya, hombres rudos, ignorantes, que no llegaron a terminar la escuela primaria decían "TRABAJAR … Y DARSE TIEMPO PARA DEFENDER EL VALOR DEL TRABAJO"...

Esos hombres y mujeres, se enfrentaron a la multinacional que los explotaba y consiguieron fijar el precio del tabaco, con mucho mayor justicia, con su precaria "organización política", las LIGAS AGRARIAS lograron que un presidente "baje" a Goya para negociar ayuda. Y consiguieron algo asi como 24 tractores.

aunque de eso no haya quedado ningún registro en los medios de prensa de la capital correntina, para que no sea mal ejemplo, si ha quedado en el alma orgullosa de esos campesinos que nunca más caminaron con la frente gacha.

Esperemos que se mantenga presente en nuestra "historia chiquita".

Hoy que parece haber retrocedido el estado a su mínima expresión y cuando hablamos del rol de su rol y de la necesidad de su presencia , parece algo utópico muy lejano a los intereses de la sociedad. Al punto que un energúmeno que se dice libertario declara que desea destruir el ESTADO y nadie responde y la vida continúa como si nada… 

Si embargo, todavía hay mucho para perder y el acostumbramiento nos lleva a ver como perdemos servicios y beneficios que son imposibles de reemplazar por el esfuerzo privado y solo nos damos cuenta de su existencia cuando las noticias nos golpean… sesenta pacientes oncológicos muertos por un fondo de patologías especiales que se elimina de un plumazo… Un servicio de información pública como TELAM que se desmantela y la democracia queda en manos de un Holding como el de Clarin y TN, Un Hospital como el Posadas que pierde personal y al resto del país no lo afecta… o el Garrahan que sigue recibiendo niños con cáncer de todas las provincias, pero se queda sin el aporte de CABA… Los más vulnerables que se quedan sin asistencia alimentaria porque una superministra no confía en la organizaciones de los propios necesitados para repartir los alimentos que se les pudren en depósitos , pero si confían en los pastores evangélicos y en una ONG que no posee infraestructura para hacerlo.

Parece ya no haber nada por perder… pero no es así… cuánto falta para que recorten programas como el de Diabetes que provee de insulinas a miles de pacientes en todo el país… quien se va a dar cuenta cuando lo hagan… O cuando corten el programa Remediar, o cuando las provincias ya no puedan proveer medicamentos… o peor, cuando te den un “baucher” (vale) para que contrates una prepaga y desaparezcan los hospitales con atención gratuita…

Cuantas libertades más podemos conseguir en cuatro años

Muchas cosas solo se valoran cuando se pierden, el aislamiento, la virtualidad y el desencanto por lo político son un peligroso combo que nos pueden llevar a una situación sin retorno. 

Espero que estas reflexiones entretejidas con la historia, pero que intentan dejar mensajes ahistóricos, no porque se desentiendan de la historia, sino porque puedan aplicarse a muchas situaciones, ayuden animen y alimenten las ganas de participar de nuestros jóvenes.

El descontento y la indignación sin organización es cosa de revoltozos

El descontento y la indignación individual te lleva al robo y la corrupción

Solo el descontento, la indignación y la conciencia de fraternidad organizadas con sentido político, logra la REVOLUCION 

LA VERDADERA, la que no implica tiros ni bombas, la democrática y profunda revolución del AMOR que todavía esta pendiente, pero cuyos cimientos debemos reconocer, porque debajo de todo este ruido y debajo de todas estas institucionalizaciones de la solidaridad que funciona en forma tan imperfecta existen huesos, sangre, corazones, lagrimas y el AMOR de muchas generaciones que so;aron con un mundo más justo, más vivible y pacifico para vosy para mi.

Yo no me animo a traicionar ese amor…

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Este artículo de opinión lo escribí más o menos en el 2001 luego de la experiencia de la Red de ONGs convocada por el arzobispo Castaña y que fuera el principio del fin de la intervención Federal a nuestra provincia. En ese momento militaba mis ya con toda la famila en la democracia cristiana y tras los pasos de Esio Silveira, construíamos en todo el país una opción que le tuerza el brazo a De la Rua y la alianza. Era el Polo Social con el pelado Farinello a la cabeza.

Participación

Único camino al bien común

Desde amplios y numerosos sectores de nuestra sociedad, se dejan oír voces denunciando la incapacidad de esta “democracia formal”, limitada y dependiente del mundo financiero, para solucionar los graves problemas sociales que día a día se agravan y multiplican.

Cada vez más se evidencia la conformación de una nueva “clase social”, la de los POLÍTICOS. Simples intermediarios al servicio de los grupos poderosos del mercado.

Mientras vastos sectores de la población consideran que estoy es lo normal, que siempre fue asi y hasta algunos piadosos cristianos proponen centrar los esfuerzos en “soportar” esta situación. En el falso convencimiento de que se debe a un extraño designio divino y no a la soberbia y el egoísmo humano. Estos sectores razonan sumidos en el desconocimiento de que LA POLITICA, es la forma de organización que los pueblos desarrollan para promover el bien común, es decir, el mejoramiento de las indicio es de vida de todos y cada uno de sus miembros.

Otros en cambio, con un espíritu critico y una firme oposición a la desesperanza entreguista y justificadora, avanzan en el análisis, desnudando el perfil elitista y soberbio de nuestro sistema partidario y de representación indirecta, apuntando acertadamente a recuperar el sentido de democracia como “gobierno del pueblo” y en la búsqueda de los mecanismos idoneos para lograr una DEMOCRACIA PARTICIPATIVA.

Existen hoy experiencias,sobre todo en el ámbito de los movimientos sociales, sindicales, ONGs y el tercer sector, donde se ensayan cotidianamente estructuras más abiertas a la participación y decididamente solidarias. Ya en el campo político, existen experiencias en países vecinos como Uruguay o Rio Grande Do Sul (Brasil), en materia institucional, con el Presupuesto Participativo.

Todavia son necesarias dos condiciones esenciales para continuar este camino. En primer lugar la conciencia de estos movimientos sociales, sindicales, ONGs, etc. De la necesidad de asumir una proyección política de sus esfuerzos particulares no significa esto la participación, camino seguro al fracaso del intento participativo. Sino la presencia comprometida en el debate de la cosa general. Sobre todo en sus dos extremos,Es decir en la discusión de las cuestiones particulares que se resuelven a nivel político y el gran debate de la identidad nacional que también se define en este ámbito.

Esta primer condición es tal vez la más importante, porque por si sola es capaz de lograr la segunda. Es decir la apertura de las estructuras partidarias y la creación de mecanismos intrapartidarios que favorezcan un ámbito de debate amplio y pluralista, que canalice cabalmente las expectativas de los ciudadanos. Que establezcan mecanismos de representatividad autenticas, posibilitando a los ciudadanos puedan instruir a sus representantes, tanto en políticas generales como en cuestiones puntuales.

Con estas dos condiciones cumpliéndose a pleno, la conciencia política de las organizaciones sociales y la apertura de los partidos políticos, todavia falta un factor indispensable. Los participantes.

No existe democracia verdadera, si todos en mayor o menor medida, como observadores atentos o como actores directos, no participamos.

NUEVAS FORMAS DE PARTICIPACIÓN

Generalmente, cuando se llama a la participación, se traza un paralelo sinematografico, pidiendo a todos y cada uno a ser “protagonistas”. Esto crea un presupuesto. Por un lado estimula el egocentrismo y el narcisismo , tendencias naturales de nuestro “yo” infantil , multiplicando los liderazgos personalistas y absolutistas, con una suerte de fiebre de protagonismo. Tal vez una de las causas de la atomización de las organizaciones y de la incapacidad de conformar mesas de debate y de consenso entre personas adultas y maduras.

Es decir, atacamos al neoliberalismo en lo económico, pero somos los más entusiastas practicantes del “liberalismo individualista” en nuestras conductas. Somos apolíticos, arreligiosos y anti gremialistas en nuestras organizaciones, cuando en el peor de los casos deberíamos decirnos “apartidarios y no confesionales”.

Pero tal vez el supuesto más grave que crea el concepto de “protagonismo” es que el protagonista es quien ejecuta la obra cumpliendo al pie de la letra las especificaciones dadas por alguien. Verdadero determinante de la situación. En popcas palabras, el protagonista cumple con lo que establece el AUTOR, representado por la ideología, los intereses sectoriales o lideres ocultos que encuentran en el protagonismo, la herramienta adecuada para la manipulación.

AUTORES DE NUESTRA PROPIA HISTORIA

La participación exige madurez suficiente para conocer nuestras posibilidades y limitaciones. Especialmente nuestra capacidad de crecer. Los que creemos que no sabemos nada, tenemos que ser conscientes de que “podemos crecer”. Quienes creen saberlo todo aprenderán que “deben crecer”. Así podremos tomar nuestro lugar en la construcción. Ocupándonos cada uno de lo que sabe y lo apasiona, a la vez que nos ocupamos “TODOS DEL TODO”. El arquitecto, el albañil, el peón y el maestro mayor, cada uno haciendo lo que le cabe, pero decidiendo entre todos, la forma final de la casa de todos.

VOCACION DE TODOS

Por último, quiero hacer una consideración especial sobre la participación de los cristianos. Siendo yo mismo, bautizado católico y atento a los mensajes del Magisterio, creo necesario, mover la conciencia de mis hermanos. En una provincia de gran mayoría de bautizados, con grandes expresiones de piedad, pero con alarmante falta de actitudes cristianas en el seno de sus organizaciones sociales, políticas y gremiales. Tal vez por la ausencia de los verdaderos cristianos en esos sectores, o peor aún, por la disociación entre fe y vida, que considera impuros a esos ámbitos y especialmente a la política, obligando a una conducta esquizofrénica de quienes viven en la iglesia según las leyes de Dios y en el mundo según las leyes del mundo ( los negocios son negocios).

El padre Hurtado, beato chileno, acusaba a los católicos desinteresados, de ser verdaderos “ agitadores sociales” al decir:

…” El escándalo de los malos cristianos es uno de los grandes responsables de la perdida de la fé de las masas, convirtiéndose en los más violentos agitadores sociales”...

En el mismo sentido el documento de “Puebla” afirma que …”el lujo de unos pocos se convierte en insulto contra la miseria de las grandes masas”...

En 1989 Juan Pablo II le decía a los laicos, es decir a TODOS los bautizados….”los fieles laicos, de ningún modo pueden abdicar de la participación en la política… destinada a promover organica e institucionalmente el bien común… Todos y cada uno tienen el derecho y deber de participar en la política, si bien con diversidad y complementariedad de formas, niveles, tareas y responsabilidades”... ( V. Y M. De los laicos en la Iglesia y en el Mundo N°42).

Entiendo que si bien, algunos son llamados en forma especial por trabajar en el campo político, la vocación política es un llamado a todos y cada uno de los cristianos, so pena de ser acusados de desidia,como lo señala el mismo documento más adelante al decir… “ los fieles laicos no pueden permanecer indiferentes, extraños o perezosos ante todo lo que es negación o puesta en peligro de la paz”...

Es urgente hoy la participación de todos los hombres de buena voluntad y especialmente de los cristianos, máxime con una oportunidad histórica en nuestra provincia como es el desmantelamiento de los partidos tradicionales y el surgimiento de nuevos espacios de debate y de construcción. Es hora de cortar con la queja estéril y desesperanzadora ante los viejos dirigentes que no quieren alejarse y decidirnos a ocupar el lugar que nos corresponde, desplazando naturalmente, con el solo peso de la dinámica de los hombres nuevos, inspirados por nuevos valores, como la solidaridad, la justicia y el diálogo, a los carcamanes que no quieren perder sus privilegios.

Juan Fernando Marcopulos

2001